El propósito de este libro está ya enunciado en su título: el “cómo” siempre implica un proceso. No basta con poner ante el estudiante una serie de dibujos realistas de animales ya terminados y pretender que aprenda a dibujarlos. Eso siempre puede ayudar, pero no es suficiente. Incluso ir de visita al zoo o a una granja, aunque lo recomendamos, puede no servirle de mucho. Si bien tal dedicación es muy loable, no es artísticamente recomendable ignorar las reglas. Hay determinadas cosas que todos los animales tienen en común y conviene entenderlas desde el comienzo. El objetivo principal de este libro es que el artista conozca el aspecto de cada criatura y sepa cómo dibujarla de la manera más eficiente posible. Hemos incluido varias páginas de directrices, métodos y comparaciones de partes de animales, así como un índice alfabético que facilita la búsqueda de los especímenes concretos a lo largo del libro.