El cielo siempre ha causado una mezcla de asombro y curiosidad; asombro al ver el espacio habitado por cuerpos luminosos que parecen regir nuestros destinos, así sea lejano en ocasiones, y curiosidad porque hay un impulso de lograr alcanzarlo y descifrarlo. De manera que el cielo y todo lo que se puede ver parecen tener un sentido y un significado para todos aquellos que lo contemplan. En este sentido, la astrología va más allá de esperar unas ciertas características de las personas nacidas en tal o cual signo o casa y, en el caso de la astrología tolteca, se trata de una definición a partir de saberse parte de un universo que trasciende a la persona y que lo ubica como parte de un lugar más grande. Por ello, con este volumen estamos acercando a nuestros lectores a ese gran saber de la civilización tolteca reflejado en su astrología.