Primer libro de la saga de Bruma. Salvador llevaba una vida tranquila, hasta que una perra llega a su casa. Pero no se trata de una perra más; Bruma habla el idioma de los hombres. Salvador se entera de que el arroyo cercano a su hogar esconde la entrada que conduce a un mundo donde no existen los humanos. Así comienza la aventura que lo llevará a cruzar el portal para ayudar a los habitantes de la Colonia. La manada de Bruma vive en las cuevas del acantilado. Pero los Mandras, los animales más crueles del bosque, quieren apoderarse del Reino y su mayor obstáculo son los perros, por eso quieren exterminar al pueblo de las cuevas.
"Fantasía pura, aventuras, humor y reflexión, eso y más es lo que encontré al leer esta hermosa historia que me dejó muchas ganas de continuar leyendo el resto de la saga Bruma (en eso estoy). "