¿Dónde empieza y dónde acaba la comunidad? ¿Son las reglas de pertenencia su borde último? ¿Hasta dónde se expanden los límites de la polis, el lugar de lo político? Hoy la frontera entre lo público y lo privado parece más inestable que nunca. Las fórmulas de comunicación, de experiencia de lo común, son cada vez más invasi vas de la intimidad, y el clamor por la defensa de esta última, al mismo tiempo que el