Dalí, entre Dios y el Diablo. Tradición, esoterismo, política, erotismo y perversión en su vida y en su obra. Pocos pintores han resultado tan polémicos como Salvador Dalí, genio para unos y abyecto mediocre, para otros. Sin embargo, hasta ahora no se ha valorado en su justa medida lo que constituyó el núcleo esencial de ecuación personal: sus relaciones con el mundo mágico y misterioso. A lo largo de esta obra estas relaciones quedarán establecidas en su justa medida. Dalí hacía de la Tradición Hermética, de la sexualidad mágica, de la alquimia y del mundo místico, el centro de la existencia. A lo largo de su vida estas relaciones fueron variando de rumbo. Para su desgracia, Dalí fue, ante todo un autodidacta en el terreno de la magia y de las relaciones con el mundo de lo paranormal. Y finalmente terminó extraviándose. El balance final de la vida del pintor evidencia un fracaso. Si bien durante su vida experimentó un impulso hacia la trascendencia, en sus últimos años, este impulso es alejado del eje central de su vida. Este libro es la crónica del fracaso de la aventura espiritual de Salvador Dalí que no fue "el más bajo de los dioses", sino el pintor más alto del Siglo XX.