Ha llovido demasiada globalización durante los últimos diez años. Tanto que ha habido tiempo para que se encharquen (y no de agua), hasta los lugares más recónditos del planeta. Pero hoy ha llegado el momento en el que deberíamos formularnos si realmente lo que se está globalizando es bienestar o miseria. Es obvio que como se describe en algunas de las viñetas del interior: nos han convertido este planeta en