Esta es la segunda aventura de Teo y Nicolás. La niña regresa a pasar el verano en casa de su tía, quien está muy emocionada, pues va a comprar una pequeña finca en el campo. A Teo la idea de pasar sus vacaciones lejos de Nicolás, no le hace ninguna gracia; sin embargo, el deseo de su tía se ve frustrado, pues el inescrupuloso arquitecto ha diseñado el proyecto sobre una zona arqueológica. Nadie lo sabe y su tía podría resultar estafada. Teo y Nicolás no van a quedarse quietos y tratarán de desenmascarar a los delincuentes.