"Un libro desopilante, de lo más ácido que ha escrito Palahniuk. Esta vez se las arregla con el placer femenino y cómo, a pesar del feminismo y sus pretensiones, las mujeres no pueden escapar a aquellos instintos con los que la evolución ha moldeado sus cerebros durante siglos. También es muy inquietante, una suerte de contraparte femenina a El Club de la Pelea."