La infidelidad consentida que incluye el factor interracial toma mayor fuerza cada día. El caso en el que el corneador es un hombre de color desata un cúmulo de pasiones que causan furor en los blog que tratan el tema.Entregar a su mujer a otro hombre es de por si una práctica que genera mucho morbo entre los participantes, pero hemos visto que cuando se trata de una pareja de raza blanca que permite a un hombre negro disfrutar del fruto prohibido de una mujer comprometida, la excitación se exacerba. La explicación a este fenómeno puede tener varias explicaciones: la primera que nos viene a la mente es el hecho de que producto de la injusta práctica de la esclavitud, gracias a Dios abolida hace décadas, muchos hombres y mujeres blancos ven la raza negra como inferior, esto unido al hecho de que la humillación es un factor presente en la práctica de entregar a su mujer a otro, el hecho de que sea un hombre "inferior", hace que la pareja se degrade a sí misma y reconozca a través de su rendición a este su propia inferioridad; la segunda, de mayor profundidad es que muchos hombres de color son físicamente más aptos que muchos hombres blancos, es así que nos encontramos en el material fotográfico y de video de estos encuentros, hombres negros más atléticos, más fuertes, más musculosos y mejor dotados que el hombre de la pareja blanca que interactúa con ellos, por lo que él será capaz de satisfacer mejor sexualmente a la mujer; por último, y quizás muy ligado a lo mencionado, el corneador de color mejor dotado, no sólo va a desatar mejores orgasmos en la mujer, sino que estará mejor capacitado para penetrarla más profundamente, logrando dos cosas, una que tocará zonas del cuerpo de la mujer que su pareja nunca podrá alcanzar y la otra que al poder bombear su potente semen prácticamente dentro de su vientre, tendrá mayor posibilidad de éxito de transmitir sus genes a través de ella.