la escasez de mano de obra y el paro estructural presentes en distintos sectores de la economía, convierten a la mano de obra extranjera en un factor cada vez más relevante para las empresas que operan en ellos. este hecho supone una creciente necesidad por parte de las empresas e orientar sus políticas de gestión de personas no sólo hacia la integración en las organizaciones actuales, sino también hacia la atracción, motivación y retención de dicho colectivo.