Una noche Juanito lo despertó un ruido. Era su papá que no podía dormir por la preocupación que le causaban las cuentas por pagar. La solución a esto llegó días después, cuando su vecina le presentó a sus padres una forma de arreglar las cosas. A partir de entonces, los papás de Juanito se emocionaron mucho y empezaron un nuevo negocio. Con el paso de los días, el niño empezó a verlos menos ya que salían mucho a trabajar y eso no le gustaba.