La magia impedecedera de La isla del tesoroÂáestriba en lo e sencial de sus mitos aventureros, pues eterna es la fascinac ión de las islas para el hombre, donde son posibles las uto pÃas y donde se guardan los tesoros soñados. ¿Qué mejor aventura que el viaje a una isla en busca de un tesoro cuya conquista exige vencer numerosos peligros, ejercitar el valo r y la fe, la lealtad y la agudeza?. Esta edición (en una n ueva y meticulosa traducción de Joan Riambau) añade unos e spléndidos dibujos, tanto en blanco y negro como en color, que se han visto muy poco hasta la fecha, y que demuestran q ue también en España hubo grandes ilustradores de libros.