Esta obra estudia la evolución de las ciencias naturales en México. De la época prehispánica se analiza el uso de la riqueza biótica con fines medicinales y alimentarios. Durante la Colonia, sobresalen las descripciones detalladas de la flora y la fauna del país, realizadas por frailes y expedicionarios, y la prensa científica que se inicia en el siglo XVIII en el Mercurio Volante. El siglo XIX se caracterizó por la fundación de sociedades científicas y por la creación de centros de investigación. La obra termina con un panorama sobre los logros científicos durante el siglo XX.