Los jefes de gobierno de las democracias parlamentarias europeas disponen de una notable variedad de tipos de poderes. Según los casos. los primeros ministros pueden nombrar y revocar a sus ministros. pueden pedir (y obtener) la disolución del Parlamento y pueden lograr hacer aprobar su programa legislativo y político.Mediante un rico análisis comparado. que va desde el primer ministro inglés al canciller alemán. pasando por el presidente del gobierno español al presidente del Consejo italiano y otros jefes de gobierno. Gianfranco Pasquino alcanza tres importantes conclusiones. En primer lugar. ningún jefe de gobierno está en grado de imponer. siempre y donde sea. su voluntad política. En segundo lugar. el poder de cualquier jefe de gobierno en Europa depende esencialmente del consenso electoral. de los votos y escaños parlamentarios obtenidos por su partido. En tercer lugar. la cualidad más importante de los gobiernos parlamentarios es su flexibilidad. es decir. la posibilidad de sustituir a los jefes de gobierno sin provocar con ello una crisis institucional. El resto queda confiado a las capacidades personales y políticas de quienes sean jefes de gobierno e intenten permanecer en el poder.