El 31 de octubre de 1517, el fraile agustino Martin Lutero realizó un sencillo gesto que cambió la historia moderna: filar en la puerta de la iglesia del castillo de Wittenberg el pliego que contenía las Noventa y cinco tesis contra las indulgencias. Aquella simbólica acción ha servido a los historiadores para señalar el comienzo de la Reforma y del protestantismo, cuyas repercusiones se prolongan hasta el presente.