Ibiza puede ser el centro del mundo, del caos, de la luz, de las noches eternas. Donde la gente se busca entre sí, los granujas se esconden, las venganzas no ocurren y, sin embargo, se viven. Donde el azar te puede jugar una mala pasada, donde la magia te embelesa hasta el extremo de confundir la realidad. Y donde algunas historias aún no siendo ciertas resultan de una crudeza tan verosímil, que pueden resultar aterradoras.Neptuno no hace prisioneros es un catalógo de sensaciones, de miedos, de sueños, de tiempos que discurren demasiado rápido en todo ese micro mundo que es Ibiza.