al proyectarse al futuro y especular sobre las tendencias sociales y educativas predominantes para el siglo que se avecina, las autoras sostiene que se necesitarán posiciones totalmente renovadas que capaciten cada vez más al hombre y la mujer para vivir en conjunto los desafíos de la sociedad por venir, y los lleve a vivir una sexualidad plena, placentera, libre y desculpabilizada. esto permitirá una comprensión más profunda de la orientación homosexual y dará las bases para la construcción de un enfoque humanista crítico de la sexualidad y de los géneros.