El remedio homeopático estimula los procesos de autocuración del organismo, y por lo tanto lo fortalece. Sin embargo, muchos de los medicamentos habituales, como por ejemplo los antibióticos, hacen exactamente lo contrario y se limitan a matar al agente patógeno, con lo que suelen provocar una debilitación del sistema inmunitario. Estas medidas drásticas deberían reservarse para infecciones graves, peligrosas o contagiosas, pero no emplearse para casos banales, que es lo que por desgracia se suele hacer. Resumiendo, podemos decir que la homeopatía se basa en tres conceptos principales:Una sustancia que provoca determinados síntomas en una persona sana puede emplearse para tratar a una persona enferma que manifieste esos mismos síntomas.La potenciación de un remedio homeopático refuerza el efecto curativo de la sustancia e impide posibles efectos secundarios indeseables.La homeopatía no trata solamente la enfermedad sino al enfermo de manera individual y según sus propios síntomas.Homeopatía. El método suave para curar¿Qué potencia hay que elegir?¿Cuál es la dosis adecuada?¿Con qué frecuencia hay que tomar el remedio?Respuestas a preguntas importantesLos remedios homeopáticosAsí encontrará el remedio apropiado.Ejemplos que le servirán de ayudaSíntomas de enfermedades y su tratamiento de la "A" a la "Z"Consejos especiales para niñosLos remedios homeopáticos y sus síntomas orientativos.Específicos: remedios contra molestias concretas.
"Libro económico pero muy interesante, claro y enriquecedor. Gracias"